¿Cómo elegir los cuadros de la casa para decorar?
Los cuadros son un elemento fundamental de decoración, que aporta mucha personalidad
Los cuadros son una buena forma de decorar las paredes de tu hogar, pero no se puede hacer de cualquier forma. Existen muchas formas, y muy creativas, de conseguir que tu casa suba de nivel sólo usando cuadros y vamos a darte algunas claves para conseguirlo.
Poner los cuadros en pareja o alineados
Da sensación de simetría, es una forma fácil de decorar y equilibra la estancia.
Poner cuadros en el cabecero del dormitorio
Siempre debemos pensar que tipo de cuadro poner, ya que deben ser cuadros que nos induzcan a la calma. Pueden ser uno o varios, tú eliges.
En solitario sobre un mueble
Ya sea sobre un aparador o una cómoda, conseguimos una llamada de atención.
Cuadros en blanco y negro
Los cuadros en blanco y negro dan una imagen de sobriedad y elegancia, así que pueden ser una buena elección para cualquier parte de la casa. Puedes poner uno, varios, una composición,… ¡todo vale! Sólo debes tener en cuenta el espacio del que dispones y el estilo que quieres darle!
Utiliza cuadros del mismo estilo
Puede que usar cuadros te suponga un problema, pero es más fácil de lo que parece. Si te resulta difícil mezclar estilos, sólo tienes que emplear la lógica, y utilizar cuadros del mismo estilo y ¡voilá!
Cuidado con las medidas
Tan malo es quedarse corto con el tamaño, como colgar un cuadro demasiado grande. Para salir de dudas, lo mejor es que lo pruebes antes, sujetándolo antes. De esta forma, podrás ver el efecto.
Buenas composiciones
Al hacer composiciones con cuadros, existen dos formas habituales:
- Simétrica. Es la composición más clásica. Los cuadros comparten tamaño, forma, marco,… y están colgados a la misma distancia. Además, reproducen una forma geométrica, como un rectángulo.
- Mezcla formas. Si quieres combinar obras con formas y tamaños distintos, tienes dos opciones: puedes hacer que el conjunto forme una figura compacta (cuadrado, rectángulo...) o, si no es así, los caminos o espacios entre obras deberían ser todos iguales.
Otros consejos
Tanto si vas a poner uno o dos cuadros, su tamaño no puede ser mayor que el ancho del sofá. Cuélgalos centrados, a 20 o 30 cm del sofá y ten en cuenta la altura del techo. El centro del cuadro debe quedar a la altura de los ojos.
Si tienes pensado iluminar el cuadro con un aplique, la forma más clásica de hacerlo es con un aplique a unos 20 cm del cuadro. Si lo haces con focos desde el techo, que queden a un ángulo de 30° del cuadro.
Cuando vayas a poner muchos cuadros juntos, no pienses en cada obra por separado. Debes visualizarlas todas en conjunto. Eso no quiere decir que las obras tengan que ser iguales, pero sí deben quedar en el mismo plano visual.
En ocasiones puede ser una muy buena opción, apoyar el cuadro sobre el mueble o el suelo en vez de colgarlo en la pared.
Así que, sí estos consejos no son suficientes, y aún te quedan dudas sobre cómo decorar con cuadros las paredes de tu hogar, consulta a tu decorador de confianza y él te llevará de la mano para conseguir una casa de revista.
